Hay marcas, instituciones y personajes que no tienen que provocar cobertura mediática de manera intensiva, sino que tienen más bien que gestionarla y saber separar entre lo que es importante de lo que es irrelevante.
En este sentido, ¿cómo saber cuáles a cuáles prestarles atención?
Aquí os damos algunas claves que pueden ser útiles para determinar la atención a dedicar a diferentes tipos de menciones:
- Se trata de una mención de un tema nuevo - se puede referir a un tema recurrente por el que nos conocen (un nuevo disco en el caso de un músico), pero que es la primera vez que es mencionado en los medios.
- Se trata de una mención de un tema inesperado - se puede referir a una situación que no tiene que ver con la actividad habitual (un accidente, por ejemplo).
- Cuando lo dice un personaje influyente - hay situaciones que se convierten en noticia cuando alguien que es respetado e influyente lo dice, aunque no necesariamente sea el primero en hacerlo.
- Cuando el tono cambia (tanto negativa como positivamente) - a veces la manera en que un tema es presentado consigue que la percepción sobre un tema cambie o incluso que genere mayor atención (las lágrimas o el enojo de una persona).
Cada razón podría estimarse en un umbral distinto según la marca, la institución o el personaje que se trate.
Por ejemplo, una conocida marca de refresco cambió su manera de reaccionar frente a los medios después de una crisis que le costó el puesto al mismísimo CEO. Lo que parecía un tema local o regional, terminó afectando a la marca de forma global y el desinterés a menciones a medios más pequeños fue pagado con creces.
No todas las menciones son relevantes y, a veces, el reto radica en saber identificar las que necesitan nuestra atención y respuesta ágil.