Aún hay, hoy en día, muchas personas que no saben qué es una landing page ni para qué sirve. Algunas, incluso sabiendo de qué trata, no la consideran necesaria. Y sin embargo forma parte de las estrategias de muchos especialistas en marketing o dueños de negocios en la red.
Una landing page, o página de aterrizaje, es una web a la que una persona llega después de haber dado a un enlace de publicidad. Suele ser una página donde se explica con mayor detalle el producto, servicio u oferta que se está promocionando, y lo hace generalmente a modo de “carta de ventas”.
Las páginas de aterrizaje son páginas web con información concreta, optimizada para los buscadores en base a ciertas palabras clave, y con contenido que incita a realizar alguna acción. Hay quien tiene sólo una página de aterrizaje, pero muchos otros cuentan con varias del mismo producto o servicio pero optimizadas para diferentes palabras clave.
También se utilizan para medir las campañas online o ROI, para ver lo que funciona y lo que no, y poder tomar decisiones para elegir las campañas que mejor funcionan.
¿Qué tienen las buenas landing pages?
- Un buen título
- Subtítulo completando la información (no todas) Optimización (no excesiva) para palabras clave
- Imagen del producto (vídeo también opcional)
- Descripción indicando los beneficios, características, pero sobre todo indicando a qué necesidades responde
- Llamada a la acción (registrar, comprar, etc)
- Opción de registro o apuntarse a una newsletter, o segunda llamada a la acción
- Testimonios de clientes anteriores (opcional)
- Todo aquello que cumpla lo que se está buscando con ella
Deben estar tan bien preparadas que el usuario se sienta atrapado a seguir leyendo más y más hasta llegar a la llamada a la acción.