Se ha hablado y escrito tanto por todos lados sobre los fallos de comunicación de la crisis del ébola en España que ya va siendo hora de reconocer los aciertos en este mismo ámbito, sobre todo desde que el viernes se decidió la creación de un comité especial para la gestión de la crisis.
Comencemos por la forma:
-En la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, la divulgación proactiva de la Vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría de que sería ella quien lideraría el comité antes mencionado indicaba por sí mismo un cambio en la gestión y, asimismo, en el tono y el estilo de la comunicación gubernamental en este aspecto. A partir de este momento, se han realizado actividades continuas y hasta dos veces al día sobre la situación: estado de Teresa Romero, personas bajo vigilancia, altas de posibles infectados, etc..
-Mientras tanto, el Presidente Mariano Rajoy comparecía en el Hospital Carlos III y realizaba una declaración institucional sin preguntas en la que decía que el riesgo de contagio era bajo, indicando que no era la posición de su gobierno y de la OMS. Asimismo, pidió a los medios de comunicación que colaboraran para difundir estos mensajes y conseguir que "esto (la crisis) acabe saliendo bien".
Pasemos ahora al tono y el estilo:
-Frente a la posición inicial de culpabilizar a Teresa Romero sobre su contagio, la nueva postura gubernamental consiste en apoyarla y poner su salud como máxima prioridad.
-La web de la Moncloa se ha convertido en el centro neurálgico de las comunicaciones gubernamentales, a la par que las redes sociales de la Vicepresidenta Sáenz de Santamaría ofrecen la misma información. Llama la atención que el twitter del Presidente Rajoy retuitea las actualizaciones de Vicepresidencia.
-La creación de un comité científico y la designación de Fernando Simón, un experto con contrastada experiencia y buenas dotes como comunicador, como portavoz del comité especial, separando así las funciones políticas y técnicas.
-En las comparecencias mediáticas, celebradas de urgencia y durante el fin de semana, Simón ha conseguido trasmitir confianza y reforzar la idea de que el gobierno se ha puesto al mando, apoyado por técnicos, y, lo más importante, que la crisis puede tener un final próximo.
Para finalizar, decir que la aparición de un contagio en EEUU puede dar un respiro al gobierno, quien puede indicar que incluso en el país que se toma de referencia en la gestión de la crisis del ébola.