Employer Branding: Planes de compensación flexibles ¿son una buena idea?
Los planes de compensación flexibles consisten en programas personalizados y voluntarios de retribución a los empleados en los que estos tienen la facultad de decidir cómo recibir su compensación anual.
Es una política retributiva muy utilizada porque ofrece una buena imagen de la empresa a la vez que permite incrementar el salario neto de los trabajadores sin ninguna obligación posterior, revisable anualmente, sin aumentar el coste salarial. Los empleados se sienten contentos, motivados y comprometidos porque las compensaciones están adaptadas a sus necesidades y criterio.
Los empleados aprovechan los beneficios económicos del poder de compra de la empresa en que se encuentran en productos como el seguro médico, los planes de pensiones, el seguro de jubilación, un seguro de accidentes, alquiler de la vivienda, gastos de guardería, renting, comida, etc. Estos pueden destinar parte de su retribución dineraria al contratar estos productos con beneficios económicos y fiscales que podría llegar a comprar por su cuenta sin ningún beneficio. La empresa no se siente resentida en los costes, mientras que sus trabajadores pueden llegar a aumentar su salario de esta forma hasta en un 10% en el mejor de los casos.
La empresa consigue unos profesionales más comprometidos y gana en ventaja competitiva, obteniendo una alta tasa de retorno de su inversión. Lo mejor de todo es que es un instrumento de fidelización de empleados y mejora de imagen interna y externa de la empresa que se puede aplicar tanto en buenos como en malos momentos, y que beneficia a ambas partes. Por eso, en España está teniendo mucha acogida en los últimos años.